Por: La Redacción.
Ciudad de México., a 15 de marzo del 2024.- Este jueves fueron encontrados los cadáveres de siete hombres en un predio del municipio de Chilchota que habrían sido ejecutados con impactos de arma de fuego y presentaban huellas de tortura en diversas partes del cuerpo.
Según reportes extraoficiales, los restos de las víctimas, que vestían ropa y calzado táctico, se encontraban abandonados en un cerro donde se habría instalado un campamento del crimen organizado.
Algunas versiones señalaban que los fallecidos –dos de ellos se encontraban decapitados– podrían ser integrantes de un grupo criminal ultimados por miembros de una organización rival, como parte de los enfrentamientos que ocurren en esa zona por el control del territorio.
Las autoridades municipales de Chilchota fueron las primeras en enterarse del suceso luego de recibir un reporte ciudadano anónimo, mediante el cual se notificó el hallazgo de los cuerpos de las siete personas en un terreno aledaño a la comunidad indígena de Huecato.
Además de la Policía Municipal, al lugar de los hechos acudió personal del Ejército, de la Guardia Civil y de la Fiscalía General del Estado (FGE), quienes acordonaron la zona mientras personal especializado del área pericial recogió evidencias.
Luego, los cuerpos fueron trasladados a las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo) para realizarles los estudios correspondientes que determinen su identidad y las circunstancias de su muerte.
El presunto campamento contaba con espacios para vigilancia, así como un área acondicionada para preparar alimentos y sitios adaptados para dormir.