Por: La Redacción.
Ciudad de México., a 3 de mayo del 2024.- La desaparición de Salvador Rangel Mendoza, obispo emérito en el estado de Guerrero, fue una noticia que acaparó la atención de los medios mexicanos y algunos medios internacionales.
Y es que, en un principio, se dijo que el religioso, quien logró un pacto entre dos cárteles de la droga para frenar la ola de violencia en Guerrero, fue víctima de un secuestro exprés en el estado de Morelos.
Aunque no se dieron a conocer detalles de este hecho, los primeros reportes de las autoridades señalaron que Rangel Mendoza se encontraba hospitalizado debido a que presentaba huellas de violencia y presuntamente fue drogado, tal como lo reveló un examen toxicológico.
Sin embargo, conforme avanzan las investigaciones se dieron a conocer nuevos datos, los cuales sugieren que pudo no tratarse de un secuestro como se informó en un principio.
Videos de seguridad arrojan nueva información
Así lo reveló el comisionado estatal de Seguridad, José Ortiz Guarneros, al mencionar que, luego de revisar videos de cámaras de seguridad, se aprecia que el obispo permaneció en un hotel los dos días que estuvo desaparecido, y entró a ese lugar por su propio pie acompañado de otro hombre, quien después se retiró.
“Las evidencias que hay en el caso ya se las dimos a la Fiscalía. Hasta donde sabemos entró voluntariamente al hotel, con una persona del mismo sexo, y esa persona después se retiró”, declaró el jefe policiaco a la prensa.
Además, dijo que no cuentan con más datos porque en el momento que recogían información llegaron los elementos de la Fiscalía General del Estado y tomaron el control de la escena.
En tanto, la ficha médica indica que los paramédicos acudieron a un llamado de auxilio al Hotel Real Ocotepec, situado en el norte de Cuernavaca, para auxiliar al obispo y llevarlo al hospital.
En ese lugar fue encontrado desnudo y con dificultad para hablar. Sólo pronunció su nombre, según el reporte consultado por el diario El Universal.
Iglesia pide no especular
Tras darse a conocer esta nueva información, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) pidió a la población y a las autoridades “que se eviten conjeturas y especulaciones que enrarecen el caso de forma innecesaria, tomando en cuenta la dignidad humana”.
Asimismo, agradeció a través de un comunicado a las personas, grupos e instituciones por su “genuina preocupación” por el caso.
Por último, aseguró que, “apenas tenga las condiciones de salud requeridas, el mismo señor Obispo Salvador Rangel rendirá su declaración e informará oportunamente”.